Mitos del Liderazgo en posiciones intermedias

Mitos del Liderazgo en posiciones intermedias.
Por John C. Maxwell

En el mundo corporativo, no existen empresas con demasiados líderes. Las organizaciones nunca pueden tener demasiados líderes. Sin embargo, hay compañías que reducen su visión a un limitado número de posiciones de liderazgo y cuando van a contratar líderes, piensan solo en términos de llenar las posiciones de la cima.
Las organizaciones crecen y caen en base a los méritos de su liderazgo, a todo nivel. Las organizaciones exitosas no se pueden dar el lujo de esperar a que alguien llegue a la cima para empezar a dirigir. Necesitan líderes de 360º ahora. ¿Porqué? Porque los líderes generan valor.
En su libro “Líder de 360º”, el autor, conferencista y asesor internacional, John C. Maxwell muestra como el 99% del liderazgo de la mayoría de las organizaciones se da en la zona intermedia y comparte los secretos para aumentar su influencia, en cualquier lugar donde se encuentre.
En él, John C. Maxwell ha establecido un compendio de mitos que han afectado a los líderes en las posiciones intermedias de una organización. Debido a estos mitos, los líderes potenciales no han podido asimilar la máxima capacidad de su potencial de influencia. En este artículo, presentamos los mitos que el Dr. Maxwell identifica y se da un vistazo a las cualidades que hacen que un líder genere un impacto desde el medio del grupo.

Mitos del Liderazgo en Posiciones Intermedias.

1. El Mito de la Posición – “No puedo dirigir si no estoy en el tope”
Uno de los principales conceptos errados que tiene la gente en relación al liderazgo es la creencia de que el liderazgo viene simplemente por tener una posición o un título. Al conceptualizar mentalmente el liderazgo, tendemos a ver los nombres en el tope del organigrama. Cuando nos piden nombrar a líderes, la mayoría mencionamos a presidentes, gerentes ejecutivos o gerentes generales. Pensamos erróneamente que el liderazgo es una posición cuando en realidad, el liderazgo es influencia.
2. El Mito del Destino – “Cuando llegue a la cima, entonces aprenderé a dirigir”
La naturaleza humana exagera el pasado, sobrestima el mañana y subestima el presente. El liderar hoy prepara al líder para más y mayores responsabilidades mañana. Si un líder no prueba destrezas de liderazgo y procesos de toma de decisiones cuando los riesgos son pequeños, entonces hay muchas posibilidades de meterse en problemas en niveles más altos cuando los costos de los errores son más grandes y la exposición es mayor.
3. El Mito de la Influencia – “Si estuviera en la cima, entonces la gente me seguiría.”
La gente que no tiene experiencia en liderazgo tiende a sobrevalorar la importancia de un título de liderazgo. Una persona puede ser nombrada a una posición pero el o ella debe ganarse el derecho a liderar. La posición no hace al líder, es el líder quien hace la posición.
4. El Mito de la Inexperiencia – “Cuando llegue a la cima, tendré el control.”
Un líder joven y audaz puede volverse impaciente al ver áreas que pueden ser mejoradas dentro de la organización. “Si yo estuviese a cargo, no hubiésemos hecho esto y hubiésemos hecho aquello. Las cosas serían diferente aquí si yo fuera el jefe.” El deseo de mejorar y la confianza personal para hacer cambios son cualidades admirables del liderazgo. Sin embargo, sin la experiencia en la vida real, un líder joven tiende a sobrestimar la cantidad de control que tienen los líderes en la cima. Mientras más alto subes y más grande sea la organización, más te darás cuenta de la compleja mezcla de variables que controlan a la organización.
5. El Mito de la Libertad – “Cuando llegue a la cima, no tendré más límites.”
Escalar los rangos del liderazgo no le da al líder un pasaporte a la libertad. Los derechos disminuyen y las responsabilidades aumentan en la medida que asciendes la escalera corporativa. El liderazgo en los niveles superiores viene acompañado de una gran cantidad de desafíos.
6. El Mito del Potencial – “No puedo alcanzar mi potencial si no estoy en la cima.”
En realidad, la mayoría de la gente nunca será el líder máximo dentro de una organización. En general pasarán sus carreras en algún lugar en las zonas intermedias. Esfuérzate por alcanzar la cima de tu juego y no la cima de la organización.
7. El Mito del Todo o Nada – “Si no puedo llegar a la cima, entonces no trataré de dirigir.”La gente que está motivada por el progreso puede verse tentada a abandonar su influencia cuando chocan contra la barrera de una promoción mayor. Estas personas ven a la organización, reconocen que no tendrán posibilidades de llegar a la cima y se rinden. Esta actitud es la de “si no puedo ser el capitán del equipo, entonces agarro mi pelota y me voy a casa.”

Definiendo las cualidades de un Líder de 360º

1. Adaptabilidad. Ajustarse rápidamente a los cambios.Los líderes en posiciones intermedias quizás no sean los primeros en enterarse pero son generalmente quienes están a cargo de la implementación. Los gerentes adaptables en zonas intermedias están dispuestos a tomar para si los cambios operacionales aun cuando no estén listos todavía emocionalmente para hacerlo.
2. Discernimiento. Entender los verdaderos asuntos.
Los buenos líderes desmiembran la maraña para poder llegar al punto de los temas. Una persona lista cree solamente la mitad de lo que escucha pero una persona realmente lista sabe cuál mitad creer.
3. Seguridad. Encuentra identidad en si mismo, no en la posición.
Los líderes de 360º efectivos tienen la suficiente seguridad en quienes son para no preocuparse por donde se encuentran. En lugar de enfocarse en alcanzar una posición, se enfocan en lograr su potencial.
4. Servicio. Se ven realizados al servir a alguien.
Un líder servicial presta servicio a la misión y lidera sirviendo a aquellos que están en la misión con él o ella. La verdadera medida de los líderes no es la cantidad de personas a su servicio sino la cantidad de personas a quienes sirve.
5. Plenitud de recursos. Encuentra formas creativas de hacer que ocurran las cosas.
La creatividad es la dicha de no saberlo todo. Pocas veces tenemos todas las respuestas pero siempre tenemos la imaginación necesaria para crear las soluciones a nuestros problemas.
6. Madurez. Coloca al equipo por delante de si mismo.
Nadie quien mantenga una actitud de “yo-primero”, será capaz de desarrollar mucha influencia sobre otros. Un líder maduro ve más allá de su punto de personal de perspectiva privilegiada y tiene el coraje de hacer los sacrificios necesarios que hagan avanzar al equipo.
7. Comunicación. Se enlaza con todos los niveles de la organización.
Muchas veces creemos que la comunicación en las organizaciones se desarrolla principalmente de arriba hacia abajo. Los líderes en la cima forjan la visión, establecen la dirección, recompensan el progreso, etc. Sin embargo, la buena comunicación es una propuesta de 360º. De hecho, a menudo las comunicaciones más críticas vienen de líderes que identifican los problemas o las soluciones en los niveles bajos y las transmiten hacia arriba por la cadena de mando.


John C. Maxwell es escritor, conferencista internacional y asesor de miles de organizaciones. Habla a cientos de miles de personas cada año y es autor de más de 40 libros incluyendo el libro de ventas millonarias “Las 21 leyes irrefutables del liderazgo.”

Este artículo fue tomado del boletín mensual del Dr. John C. Maxwell “Leadership Wired” disponible en http://www.maximumimpact.com/ y traducido por Luis Kowalski.
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