Un día Perfecto

A continuación comparto con ustedes un escrito de Robin Sharma, escritor del libro "El Monje que vendió su Ferrari", con recomendaciones para tener un día perfecto.

Disfrútenlo y sobre todo, aplíquenlo.

LuisK

 

"Una de las secciones de mi más reciente video para el programa de Coaching Mensual que mantengo, está relacionado con "El Día Perfecto". Mientras que nada es perfecto en los negocios o en la vida, grabar o registrar lo que para ti resultaría un día ideal es una movida inteligente, ya que con mayor claridad llegan las mejores elecciones.

 

¿cuál ha sido el mejor día que has tenido en los últimos 12 meses? ¿qué lo ha hecho tan especial e inolvidable? ¿Qué cosas estabas haciendo en ese momento que te dieron esos resultados superiores? Una vez que sabes lo que funciona, puedes buscar la forma de hacerlas con más consistencia y la consistencia es generadora de la Maestría.

 

He aquí cuatro recomendaciones para un día perfecto:

 

1. Levantarse temprano. El hecho de levantarse temprano es un regalo que te haces a ti mismo, una vez que instalas el hábito. Si, al comienzo resulta difícil, pero después de algunas semanas tendrás más tiempo para ti cada mañana, tiempo para pensar, leer, visualizar, ejercitarte y condicionarte para obtener resultados grandiosos.

 

2. Mantén una programación. Las cosas que se establecen en una programación son las cosas que finalmente se realizan. El éxito y la felicidad no ocurren por accidente. Ellas ocurren por elección consciente. Programa tus prioridades y las cosas más importantes en tu vida de forma que puedas lograr hacerlas.

 

3. Se agradecido. Aunque existen muchas cosas que puedes hacer para asegurarte un gran y perfecto día, considero que invirtiendo 5 minutos en dar Gracias moldea la forma cómo percibo el día. Por favor recuerda, el estrés y la gratitud no pueden compartir la misma habitación y puedes podrás ver más de aquello a que le prestas tu atención. Por tanto, enfócate en lo mejor y bloquea el resto.

 

4. Crecimiento. Por mucho que nos resistimos al cambio, es un hecho que los seres humanos nos sentimos más felices cuando estamos creciendo. Para vivir días perfectos, haz cosas que te saquen de tu zona de comodidad y te lleven a la zona de incomodidad. Un día con cero crecimiento es un día vivido sin plenitud. Los temores afrontados tienen una muerte súbita."